Síndrome metabólico daña tu hígado

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La enfermedad hepática por depósito de grasa está considerada en la actualidad como la manifestación hepática del síndrome metabólico. Fuente: Photos.com
J. Manuel Reyes

POR: J. Manuel Reyes

Editor de Salud180.com Aficionado a las nuevas ideas. Una palabra lo cambia todo.

09-05-2013

La enfermedad hepática por depósito de grasa está considerada en la actualidad como la manifestación hepática del síndrome metabólico, que asociado con otros factores como la obesidad y diabetes (“diabesidad”), pueden conducir a un daño crónico del hígado, de acuerdo con el doctor Francisco Bosques Padilla, profesor titular de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL).

 

El síndrome metabólico se está convirtiendo en una causa común de cirrosis tanto en Estados Unidos, como en América Latina, ya sea como causa única o en combinación con el alcohol, con la hepatitis C o con ambos. Muchas personas con cirrosis tienen más de una causa de daño hepático.

 

La enfermedad del hígado graso puede progresar hacia la cirrosis y hepatocarcinoma, además de que cada vez más común está asociada con la obesidad, diabetes, desnutrición proteica, enfermedad de las arterias coronarias y los medicamentos corticoesteroides.

 

Asimismo, la cirrosis provoca resistencia a la insulina, una hormona producida por el páncreas que le permite al cuerpo usar la glucosa como energía. Con la resistencia a la insulina, los músculos y grasas del cuerpo así como las células del hígado no usan la insulina adecuadamente.

 

El páncreas intenta satisfacer la demanda de insulina produciendo más, pero el exceso de glucosa se acumula en el torrente sanguíneo y causa la diabetes tipo 2, además de que se presentan otras manifestaciones y complicaciones, tales como gastropatía, edema, cistis (líquido acumulado en el abdomen), gastropatía y várices esofágicas.

 

Para prevenir la enfermedad del hígado graso, de acuerdo con el también expresidente de la Asociación Mexicana de Hepatología y miembro del Consejo Mexicano de Gastroenterología, es vital que se evite el síndrome metabólico mediante sanos hábitos de alimentación, un adecuado control del peso y controlar los niveles de azúcar y sodio en el cuerpo.

 

También es importante tener debidos controles para una temprana detección del virus de la hepatitis C, evitar las conductas sexuales de alto riesgo y contar con las vacunas contra la hepatitis A y B.

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