Alerta, podrías estar repitiendo tus historias familiares

Nuestro grupo familiar nos hereda muchas cosas: nos da un sentido de pertenencia, nos provee de valores, de creencias, de modos para enfrentar a la vida.

Nos enseña sobre el matrimonio, sobre el dinero, sobre la educación: desde cómo preparar un platillo, alimentar a un bebé o celebrar una fiesta.

Nos instruyen sobre cómo son los hombres, las mujeres, los jefes, los empleados. ¡Y qué bueno!

Necesitamos de nuestro grupo familiar para hacernos de una vida. Pero, repites historias de familiares   Aprende a crear tu propia historia

Sin embargo llegará el día en el que tendremos que dejar de “pensar y actuar como ellos” para empezar a hacerlo por cuenta propia y a actuar en consecuencia.

Hacer esto es muy doloroso, y lo es porque se despiertan sentimientos de culpa, hay remordimientos, sensaciones de vacío y sentimientos de traición.

Des-identificarse con el clan familiar duele. Duele mucho. Y seguramente nos encontraremos con opositores que nos señalarán y nos acusarán por esto.

Si tú estás repitiendo la historia de cualquiera persona de tu familia, es seguro que no has logrado dar el paso de desapegarte.

Requiere resistir el sentimiento de culpa pero que es fundamental, indispensable para salir de esa repetición que te limita y te impide escribir tu propia historia.

¿Te atreverás a cuestionar lo que te enseñaron? ¿Les dio resultado vivir con esas creencias? ¿Qué repetirán tus hijos si no desatas los hilos de tu historia familiar? ¿Repites historias familiares?