¿Por qué no puedes resistirte al postre?

Para muchos es una cuestión de fuerza de voluntad, para otros una necesidad. Sin embargo, ¿por qué es tan difícil evitar comer un postre;  es algo imposible de realizar?

De acuerdo con un estudio publicado por la Journal of Clinical Investigation, las emociones son el factor principal que influye en el apetito.

Esto se debe a que las hormonas del estómago se comunican directamente con el cerebro, lo que genera una sensación placentera y reconfortante a sentimientos como el estrés o angustia tras comer un alimento dulce.

  ¡No eres culpable!

Aunque la capacidad de controlar la tentación permite a las personas desempeñarse con éxito en la vida, ¿por qué unos tienen mayor autocontrol que otros, ejemplo, a comer un postre? Una investigación de la Universidad de Colonia y Dartmouth Colege, sugiere que la clave se encuentra en el cerebro de cada persona.

El estudio combina  la neuroimagen funcional y la experiencia de muestreo, con el objetivo de revelar marcadores cerebrales que predicen el actuar de los individuos y si son susceptibles a ceder a impulsos como es consumir un postre.

En el análisis se confirma que existe una relación estrecha entre alimentación y la actividad en el núcleo accumbens (NACC). Una mayor actividad NACC se asocia con un aumento en la  probabilidad de fallar en el autocontrol, mientras que la actividad IFG es exitosa a la resistencia a las tentaciones.

Sin embargo, no siempre es malo comer un postre, incluso puede ayudarte a bajar de peso. Un estudio de la   Universidad de Tel Aviv, señala  que comer postre en el desayuno, por ejemplo galletas o pasteles, puede ayudar a las personas que se encuentran a dieta a perder más peso. Esto se debe a que les genera satisfacción y reduce el hambre que podrían experimentar a lo largo del día.

Recuerda, que lo mejor, es tratar de mantener una dieta balanceada y una vida activa. Esto con el objetivo de que no tengas que privarte de ningún alimento. ¡Cuídate!