IPN crea un generador de ozono para aplicaciones médicas

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Daniel Moreno
Daniel Moreno
Samuel Arroyo

POR: Samuel Arroyo

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11-07-2011

La ozonoterapia es una alternativa médica de reciente creación y por eso en México no existen avances tecnológicos suficientes para darle un sólido sustento y, con ello, lograr diversificar su uso en los centros hospitalarios.

 

Esto motivó a Daniel Moreno Rojero, estudiante de la Unidad Profesional Interdisciplinaria de Biotecnología (UPIBI) del Instituto Politécnico Nacional (IPN), a diseñar y construir un generador de ozono que, además de transformar la molécula de oxígeno (O2) proveniente del aire en una molécula de ozono (O3), cuenta con un innovador sistema de control que regula y muestra qué cantidad se usa del elemento.

 

Con éste se pretende que los altos costos que provoca, debido a los aparatos importados, disminuya considerablemente y a su vez, se fomente el uso del ozono como herramienta para atender y tratar diversas patologías.

 

El joven científico explicó que el generador de ozono tiene como elemento principal un tubo de acero con un dieléctrico concéntrico, en cuyo interior se inyecta oxígeno o aire que proviene del medio ambiente y se le suministra una descarga eléctrica de alto voltaje para inducir la transformación de la molécula de oxígeno en una molécula de ozono.

 

Desarrollo tecnológico

 

El desarrollo tecnológico se controla digitalmente mediante la tecnología de efecto corona para producir ozono y la energía ultravioleta para monitorear la concentración del mismo.

 

Moreno Rojero comenta: “el efecto corona para la producción de ozono consiste en ionizar el aire que rodea a los conductores de alta tensión del tubo dieléctrico, lo cual ocurre cuando el gradiente eléctrico supera la rigidez dieléctrica del aire y se manifiesta en forma de pequeñas chispas o descargas a centímetros de los conductores”.

 

Para realizare este prototipo, el joven científico contó con la asesoría de los catedráticos e investigadores Jorge Isaac Chirez Oria de la UPIBI y Tatyana Poznyak de la Escuela Superior de Ingeniería Química e Industrias Extractivas (ESIQIE).

 

Daniel Moreno informó en la presentación del prototipo, que las perspectivas que tiene a futuro son modificarlo para que cuente con dos tubos generadores de ozono, diseñar una interfaz para conectarlo a una computadora y patentar la tecnología para comercializar el equipo. Esto podría significar un gran avance en materia médica.

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