¿Transfusión de sangre, fuente de eterna juventud?

Más allá de la ficción y la leyenda, la idea “vampiresca” de que la eterna juventud puede encontrarse en el consumo o transfusión de sangre, hoy podría ser una realidad apoyada por la ciencia, de acuerdo a un estudio de la Universidad de Stanford.

Las transfusiones de sangre representan un riesgo para la salud. Un artículo de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de  México (UNAM) señala que  los donadores de sangre infectados que se presentan a donar en el periodo entre el inicio de la infección y la posible detección del agente infeccioso en sangre (ventana diagnóstica), no pueden ser detectados. Por lo que su sangre es un peligro potencial.

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La transfusión de sangre joven podría revertir el proceso de envejecimiento y curar enfermedades entre las que encuentra el Alzheimer.  Sin embargo, ¿qué sucede en este campo? Te presentamos el siguiente vídeo  (en inglés), en el que  Thomas Rando, profesor de Neurology  and Neuroligical  Sciences Stanford School of Medicine.

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Las proteínas de la sangre de un individuo más joven que es transferida a otro más anciano, es capaz de provocar cambios positivos a nivel estructural en el cerebro, músculos y corazón del más viejo. Aunque se habla de un rejuvenecimiento, no significa que se hable de una inmortalidad. Ya que este proceso sólo revierten algunos daños producidos por la edad.

Otra investigación realizada por la Universidad de Harvard, y dirigida por Amy Wagers y Lee Rubin, se centró en una proteína llamada GDF-11. Ésta, al ser inyectada, se observa un aumento en el nacimiento de neuronas en el hipocampo y también en el bulbo olfatorio, una capacidad que también se pierde con los años. Además de mejorar el sistema vascular del cerebro.

La transfusión de sangre joven podría ser clave para prevenir enfermedades mentales u otras relacionadas con la edad. Sin embargo, por el momento lo único que existe es cuidar de tu salud desde ahorita y no hay mejor forma que a través del ejercicio y la alimentación. ¡Cuídate!