Que la lactancia no acabe con tus senos

Compartir en Instagram se abrirá una nueva ventana
Guardar en Favoritos
Guardar en Favoritos
Si tus pezones están muy adoloridos, puedes evitarlo cambiando de posición cada vez que amamantas. Esto desplaza la presión a una parte del pezón. Cortesía Getty
Salud180, El estilo de vida saludable

POR: Salud180.com

Somos el sitio líder de estilo de vida en México y América Latina. Sumamos a los mejores expertos, para mejorar tu calidad de vida.

22-04-2022

La Organización Mundial de la Salud recomienda la lactancia durante 6 meses como mínimo hasta los dos años de edad del bebé. Sin embargo, este proceso natural puede afectar negativamente a los senos: heridas, resequedad, obstrucción, dolor o estrías.

 

Si tus pezones están muy adoloridos, puedes evitarlo cambiando de posición cada vez que amamantas. Esto desplaza la presión a una parte del pezón. Además, después de amamantar, extrae con tu mano un poco de leche y frota ésta suavemente sobre los pezones”, así lo recomienda una investigación del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos.

  ¡Que nada arruine este momento!

 

Por ello te proporcionamos algunos consejos que te ayudarán a cuidar tus senos. ¡Inténtalos!

  1. Resequedad

 

Para evitarla, María Larée, jefe de Neonatología del Hospital Clínico de la Universidad de Chile, sugiere que te abstengas del uso de jabón sobre esta zona a la hora del baño, ya que disminuye la hidratación natural de la piel.

 

  2. Dolor

 

Puedes aliviarlo a través de frotar una pomada con lanolina ultrapurificada de grado médico, sobre tus pezones después de amamantar.

  3. Grietas o heridas

 

Es normal que éstas aparezcan en el proceso de amamantar, para ayudar en su curación un estudio del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos sugiere que lo más importante es descansar lo suficiente, consumir alimentos sanos y beber suficiente líquidos, ya que esto fortalece el sistema inmunológico.

  4. Estrías

 

De acuerdo con María Larée, lo mejor para evitar esta situación es profundizar la hidratación, con ello fortaleces la epidermis. Lógralo a través del uso de una crema hidratante, con la que darás masajes a tu pecho una vez al día por lo menos. No olvides que está debe ser hipoalergénico, sin perfume, de textura liviana y de rápida absorción.

 

¡Ojo! Si aún con los cuidados indicados sigues experimentando dolor en el pezón y senos, es esencial que acudas a un experto de la salud ya que esto puede conducir a una infección. ¡Cuídate!

 

Compartir en Instagram se abrirá una nueva ventana
Guardar en Favoritos
Guardar en Favoritos
Lo que pasa en la red