¿Posponer las cosas, está en los genes?

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“Lo puedo hacer mañana”, ¿te suena familiar? Ya sea dejar un trabajo pendiente, una tarea, leer un libro o hacer ejercicio, la procrastinación es una conducta que puede impedir que alcances tus objetivos y a largo plazo puede generar frustración o insatisfacción.
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POR: Salud180.com

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15-04-2014

“Lo puedo hacer mañana”, ¿te suena familiar? Ya sea dejar un trabajo pendiente, una tarea, leer un libro o hacer ejercicio, la procrastinación es una conducta que puede impedir que alcances tus objetivos y a largo plazo puede generar frustración o insatisfacción.

 

Sin embargo, un estudio de la Universidad de Colorado en Estados Unidos, señala que el dejar las cosas para después y la impulsividad son conductas genéticamente relacionadas y hereditarias; ambas podrían provenir de la misma rama evolutiva, aquella que se relaciona con la habilidad para perseguir y lidiar con las metas.

  Parte de nosotros…

 

Publicado por la Asociación de Ciencias Psicológicas, el estudio revela que la  impulsividad era una herramienta de nuestros antepasados para realizar acciones en el momento, mientras que la procrastinación es un efecto del “mundo moderno” por medio del cual somos capaces de enfocarnos en metas a mayor plazo.

 

El estudio contó con la participación de  181 pares de gemelos idénticos o monocigóticos y 166 pares de mellizos o gemelos dicigóticos para probar sus tendencias de impulsividad y procrastinación, así como la posibilidad de establecer y mantener metas.

 

Aquellos que comparten el 100% de sus genes  mostraron mayor similitud de comportamiento que los mellizos, por lo que se pudo concluir que estas conductas tienen una influencia más genética que ambiental.

 

Esta investigación,  rompe el concepto de que la procrastinación parte de un pensamiento, miedo o una idea que se establece en la mente.

 

Ejemplo de ellos es un estudio realizado por la Universidad de Constanza en Alemania, que señala que esta conducta surge porque las personas creen que el día de mañana será más adecuado para poner en práctica lo planeado.

 

Dejar las cosas para mañana es una conducta, que aunque sea genética, se puede cambiar. Recuerda, tú eres el constructor de tu vida. ¡Cuídate!

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