El lado positivo de 4 malos hábitos

40% de las acciones  que realizamos cada día de nuestra vida son hábitos, esto de acuerdo a un estudio realizado por la Universidad de Duke, en Estados Unidos; pero, ¿qué se necesita para cambiar los malos hábitos, y éstos siempre son perjudiciales?

Cambiar un hábito genera modificaciones en los patrones neurológicos, en otras palabras: alterar una rutina malo o buena trasforma el cerebro. Así lo indica  Charles Duggig, autor del libro “El poder de los hábitos”, quien sugiere que lo único que se necesita para lograrlo es fuerza de voluntad.

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Todo depende de cómo se mire y de haga

Se habla mucho de que los malos hábitos, como el de los videojuegos, comer de más y no hacer ejercicio tienen efectos perjudiciales para la salud. Sin embargo, Salud180.com, con información de la publicación Selecciones, te presenta el lado positivo se cuatro malos hábitos. ¿Te animarás a cambiarlos?

1. Música a todo volumen. Un estudio de la Universidad de Manchester señala que entre más alto sea el volumen de la música más placer genera. Esto se debe a que el sistema vestibular del oído (que regula el equilibrio y transmite vibraciones) cuando las ondas sonoras lo activan, envía una señal “positiva” o “agradable” al cerebro.

Sin embargo, para obtener este beneficio la música no tiene que superar los 30 decibeles, caso contrario de lo que se puede encontrar en una discoteca que regularmente supera los 100, situación que puede producir daños al oído.

2. Alcohol. Investigaciones realizadas en Holanda y República Checa indican que el rico contenido de vitamina B6 de la cerveza previene la acumulación de homocisteína, aminoácido que en concentración alta parece tener relación con los infartos. Y como el vino, la cerveza contiene polifenoles, sustancias que reducen el colesterol malo.

Aunque, beber más de 30 o 40 mililitros de alcohol al día puede dañar la salud; además, el alcohol contiene muchas calorías.

3. ¡Videojuegos! Estos pueden  estimular el desarrollar de habilidades de planeación y el pensamiento estratégico. Así como facilitan el aprendizaje de conceptos básicos de física, de acuerdo a una investigación realizada por la Universidad Glyndwr.Sin embargo, algunos juegos pueden producir síntomas parecidos a los del estrés. Los chicos pequeños son más vulnerables porque les resulta más difícil distinguir entre lo real y lo ficticio.

4. Escribir mensajes de texto. Un estudio realizado por la profesora Helen Haste, del Programa de Investigación Social Nestlé, en Londres, descubrió  que los adultos jóvenes consideran que los mensajes de texto se han vuelto esenciales en la relación con sus padres. El teléfono es más directo, pero los mensajes de texto matizan las emociones y evitan las malinterpretaciones de tonos de voz. 

No todos los malos hábitos perjudican la salud, simplemente se debe de tener un equilibrio. Algo que se puede lograr con fuerza de voluntad. ¡Inténtalo!