¿Cómo mejorar la comunicación con mi pareja?

Compartir en Instagram se abrirá una nueva ventana
Guardar en Favoritos
Guardar en Favoritos
Pamela Jean te dice cómo mejorar la comunicación con tu pareja. Cortesía: Gettyimages
Salud180, El estilo de vida saludable

POR: Pamela Jean. Colaboradora

Licenciada en Comunicación y Master en Programación Neurolingüística. Sígueme en @PamJeanZ

16-04-2015

Cuando analizamos qué cosas pueden ayudar a mejorar nuestra relación en ocasiones, pensamos que son los viajes, regalos o cenas caras, pero pocas veces reflexionamos en buscar algo que verdaderamente fortalezca la unión para siempre: la comunicación asertiva.

 

Contesta sinceramente a las siguientes preguntas:

 

- ¿Te has sentido con ganas de señalarle a tu pareja algo que te molesta pero no lo haces por miedo a discutir, despertar su enojo y acabar peleados? ¡Y eso sinceramente te da mucha flojera!

 

- ¿Te ha sucedido que bajo el influjo del alcohol, algún medicamento o quizás un momento de rabia explotas como olla exprés, y de manera catártica y agresiva acabas reclamándole lo del presente y lo del pasado, diciendo cosas de las que después te arrepientes y dañando la relación?

 

Seguramente sí, y es completamente normal ya que nadie nos enseña cómo decir lo que nos molesta de manera asertiva. Aprender a hacerlo les permitirá comunicarse productiva y positivamente, evitando los principales detonantes de problemas: la pasividad y agresividad.

 

Fíjate en esta balanza. La asertividad se encuentra en el equilibro justo entre ser pasivo y callar lo que te molesta por miedo a perder afectos, permitiendo que los demás pasen por encima de ti.

 

 

Y la agresividad es la que te hace decir todo lo que piensas de manera catártica y descontrolada, sin tomar en cuenta los sentimientos de tu pareja, consiguiendo respuestas negativas que hieren más que fortalecer la relación.

 

Entonces, ¿qué es la asertividad?

 

Es saber decir lo que quieres sabiendo elegir de manera efectiva cuándo, en dónde y cómo decir las cosas. Vamos por partes…

 

1. ¿Cuándo?

 

Discutir cuando ambos están enojados por las emociones es una mala idea, ya que cuando la mente emocional está activa, la racional entra en standby.

 

Y sin la capacidad para razonar eficientemente ninguno de los dos podrá tomar decisiones inteligentes, al contrario, dirán y harán cosas de las que después se arrepentirán.

 

SOLUCIÓN. Definan una palabra clave poderosa, puede ser cualquiera. El trato será que cuando uno de los dos identifique que ese no es el momento adecuado para expresar su sentir, la dirá. E inmediatamente estipulen una fecha y lugar para reunirse a platicarlo.

 

Por sí misma la palabra clave significará: “Me interesa lo que me dices, me interesa llegar a un acuerdo, pero hablémoslo después pues este no es el momento”; puede ser incluso una palabra graciosa que les permita contrarrestar el enojo, pero elíjanla juntos. 

 

2. ¿En dónde?

 

Ante todo, no se peleen ni discutan frente a la gente. Las indirectas o los comentarios sarcásticos delante de la familia y amigos con la técnica: “Te digo Juana para que me escuche Chucho”, es doloroso, agresivo y despierta al “Hulk” que todos llevamos dentro. ¡No lo hagas!

 

Además, tarde o temprano ustedes se reconciliarán pero la familia y amigos no olvidan, y despertarán rumores que después no sabrán cómo acallar. Prudencia.

 

SOLUCIÓN. Si tu pareja hace o dice algo que te molesta. en ese momento aléjate, distráete con otra cosa, platica con alguien y espera un instante de privacidad. De paso permitirás que se te baje el enojo, podrás organizar y planear mejor tus argumentos, y verás las cosas de manera más clara.

 

3. ¿Cómo lo dices?

 

Ante todo, cuida los sentimientos de tu pareja para evitar que se ponga a la defensiva al sentirse agredido, para que te escuche y puedan conciliar, es necesario que procures que todos sus canales de comunicación estén abiertos.

 

SOLUCIÓN. No generalices con comentarios como: “Siempre haces lo mismo”, “Nunca me escuchas”, “Todo(a)s son iguales”. No etiquetes con frases como “Estás loca” o “Eres un egoísta”.

 

No traigas al presente situaciones del pasado pues perderás credibilidad y destaparás la caja de Pandora; todo en su debido momento y si decidiste perdonar, entonces sé congruente. Di lo que sí quieres, señala el error o la situación que te molesta, pero después sé claro y conciso señalar lo que te gustaría que hiciera diferente.

 

También es importante es que pienses en equipo, el punto no es encontrar al culpable sino llegar a un acuerdo que les permita funcionar como aliados. 

Aclaracion:

El contenido mostrado es responsabilidad del autor y refleja su punto de vista, más no la ideología de Salud180.com

Compartir en Instagram se abrirá una nueva ventana
Guardar en Favoritos
Guardar en Favoritos
Lo que pasa en la red