Así trabajan tus neuronas…

Las redes neuronales involucran tres elementos esenciales: las neuronas, la comunicación entre ellas o sinapsis y sus conexiones. Se trata de un proceso complejo y todo un reto para los neurocientíficos.

“Sabemos cómo funciona la sinapsis, las neuronas y a nivel sistémico conocemos el funcionamiento del núcleo cerebral, para qué sirve y qué funciones tiene. Pero entre la parte sistémica y la celular hay un hueco muy grande. Hasta la fecha no sabemos cómo funcionan cien de ellas juntas”, reconoce el doctor José Bargas Díaz, del Instituto de Fisiología Celular de la UNAM.

  Esto te ayuda a tener memoria

La sinapsis entre una neurona y otra puede aumentar su fuerza, lo cual se conoce como potenciación, o disminuirla, lo que se llama depresión. Cuando lo hacen por largo tiempo se denomina potenciación de largo plazo y depresión de largo plazo. Algunos investigadores sugieren que este mecanismo podría ser la base de la memoria.

Sin embargo, las sinapsis pueden conectarse, deprimirse, e incluso, eliminarse. El fenómeno completo se conoce como plasticidad sináptica de largo plazo y el resultado es que hay unas neuronas que quedan mejor conectadas, se agrupan y tienden a disparar señales eléctricas juntas.

De tal forma, que unas sinapsis se refuerzan y otras se debilitan provocando cambios en los pesos sinápticos de todo el circuito, es decir, de todas las neuronas que están conectadas. Así se forman trayectorias para que fluya la actividad cerebral.

En ellas, las sinapsis que están debilitadas se excluyen, mientras las que están reforzadas se incluyen en la trayectoria. Por lo tanto, con este mecanismo de cambiar pesos sinápticos se van formando microcircuitos o redes neuronales.

Con el fin de explicar la formación de estos circuitos, existen varias hipótesis que plantean la existencia de neuronas unidas física o funcionalmente, es decir, que trabajan juntas.

Se plantea que un microcircuito o ensamble está formado por grupos que contienen tanto neuronas de proyección como interneuronas; y estas últimas son funcionalmente similares en los diferentes circuitos cerebrales, aunque sus porcentajes cambian, provocando que los microcircuitos puedan ser repetitivos y asociarse o disociarse, reorganizando los circuitos.

De acuerdo con el investigador, al parecer nacemos con algunos circuitos preensamblados, hechos con grupos de neuronas que se activan de manera simultánea o correlacionada, pero al tener un nuevo aprendizaje se crean otros.

Por lo tanto, en el tiempo en que se forman nuevas sinapsis hay cambios estructurales y el circuito se reorganiza. Este complejo proceso es una muestra de la sorprendente plasticidad de nuestro cerebro.