¡Acaba ya con la tos!

Tener tos afecta tu calidad de vida, porque no puedes dormir bien o hacer tus actividades físicas con normalidad.

No sabía que era tan agobiante convivir con alguien que tiene tos. Confieso que el acompañante sufre igual que el enfermo; no saben la pesadilla de fin de semana que tuve. 

Mi esposo no paró de toser en toda la noche; lo peor, se me fue el sueño, lo veía toser y quería meterle un calcetín en la boca (jajajaja). Pobre, pero después de dos noches así y estar de vacaciones en un rancho, tuve que recurrir a los remedies caseros. 

Toma nota, todos son cosas que generalmente hay en tu cocina. Estos son los que encontré en internet y probé, pero hay un millón.

  ¡Deja de toser!

Haz tu propio jarabe de miel

Mezcla una cucharada de miel con otra de aceite de coco y el jugo de un limón; caliéntalo y tómatelo… Es el más fácil y común.  

Té de pimienta negra y miel

No sabía pero la pimienta estimula la circulación y el flujo de flemas; la miel es un alivio natural de la tos. Utiliza una cucharadita de pimienta fresca con dos de miel en una taza, y luego llénala con agua hirviendo. Tapa y deja remojando por 15 minutos; cuela y bebe.

Té de tomillo

En algunos países el tomillo es un tratamiento contra la tos, las infecciones respiratorias y la bronquitis, así que cuando veas alguna pomada de tomillo, cómprala, es una maravilla. Si no haz un té de tomillo, es muy efectivo.

Pon 2 cucharadas de tomillo machacado en una taza de agua hirviendo por 10 minutos, cuela la mezcla. Añade miel y limón para mejorar el sabor y añade fuerza al remedio.

Chupa un limón

Este remedio es antiguo, popular, práctico y efectivo. Prepara la mitad de un limón y añade sal y pimienta; después chúpalo.

Si las molestias persisten, no olvides visitar a un médico para descartar la presencia de alguna infección.