Embarazadas tienen más probabilidades de sufrir violencia

Una encuesta en hogares mostró que hay una probabilidad de 60.6% que una mujer embarazada sea agredida que una mujer que no lo está, según información de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, quienes definen esta problemática como “violencia o amenazas de violencia física, sexual o psicológica/emocional ocasionadas a la mujer embarazada”.

En información difundida por el Centro Nacional de Equidad de Género, se pueden encontrar las ideas de algunos autores que citan a la violencia como una complicación del embarazo con mayor frecuencia que a la hipertensión, la diabetes o cualquier otra complicación seria, lo anterior fue expresado en “Battering and Pregnancy.” (Midwifery Today 19:1998).

La institución menciona que además de las consecuencias físicas, la violencia doméstica durante el embarazo puede tener consecuencias psicológicas. La mujer agredida por su pareja está en mayor riesgo de sufrir estrés, depresión y adicción al tabaco, el alcohol y las drogas.

A largo plazo, la violencia durante el embarazo puede llegar a perjudicar el estado psicológicos del niños, quien probablemente se convertirá en testigo de la violencia doméstica. Además, existen muchas probabilidades de que el hombre que golpea a su compañera también golpee a sus hijos.